¿Qué es el Año Jacobeo?
Año Santo o Jubilar es un tiempo en el que la Iglesia concede singulares gracias espirituales a los fieles a imitación de lo que la Biblia dice del Año Jubilar de los israelitas: cada 7 años era Año Sabático.
El caso es que fue el Papa Calixto II, en 1122, quien, dada la magnitud que alcanzaba la peregrinación a Santiago, decidió distinguir al santuario compostelano con el "Privilegio jubilar" o de los "Años Santos", dispensador de gracias muy singulares. Ratificada esta concesión por Alejandro III por la Bula en 1179, se establece en ella que serán "Años Santos Compostelanos" aquellos en los que el día 25 de julio, festividad del martirio de Santiago, coincida en domingo. Hasta ahora ha habido 118 celebraciones jubilares. Es curioso constatar que la pasada de 1993 coincidió con la plena entrada del "Acta Única" que configura una nueva Europa sin fronteras, situación muy unida al fenómeno europeísta de la peregrinación a lo largo de los tiempos.
Gracias jubilares del Año Santo: Indulgencia plenaria
Se da bajo las siguientes condiciones:
- Visitar la catedral recitando alguna oración por ejemplo el Padre Nuestro o el Credo, orando por las intenciones del Romano Pontífice.
- Recibir los Sacramentos de la confesión (15 días antes o 15 días después de la visita).
- Comulgar tras la confesión.
La Puerta Santa:
Un capítulo especial merece la "apertura de la Puerta Santa", con la que se inicia el Año Jubilar. Se abre en la tarde del 31 de diciembre del año precedente.
Entonces, el Arzobispo de Santiago derriba desde el exterior, tras golpearlo por tres veces, el murete que tapia la llamada "Puerta Santa", sita en la girola catedralicia.
Desde ese momento permanecerá abierta todo el "Año", hasta el siguiente 31 de diciembre en que será de nuevo tapiada.