Hacer el Camino de Santiago con niños
31/07/2025

El Camino de Santiago con niños puede ser una aventura familiar muy especial, llena de vivencias únicas y memorables para los más pequeños de la casa.
Decidir embarcarse en la hazaña de hacer el Camino de Santiago con niños puede dar algo de vértigo, pero será un plan de vacaciones familiar perfecto. Toda una valiosa lección de vida y de aprendizaje para ellos.
Combinar naturaleza, momentos compartidos, anécdotas, risas y dificultades superadas en cada etapa realizada, será un acontecimiento imposible de olvidar. Además de una gran oportunidad para estrechar lazos y fortalecer vínculos fuera de la rutina diaria.
Sin embargo, para hacer que la experiencia sea redonda no se puede dejar nada al azar. En este sentido, la planificación y la organización previa son esenciales para lograrlo y existen una serie de factores y consejos que debes tener en cuenta. Te lo contamos todo.
Beneficios de hacer el Camino de Santiago con niños
Realizar el Camino de Santiago en familia, además de aumentar la complicidad entre padres e hijos y potenciar la unión familiar, dotará a los niños de innumerables historias que contar en el futuro.
Durante el peregrinaje, intercambiando experiencias con otros caminantes, descubrirán la importancia de valores como la solidaridad, la empatía y el compañerismo. Tan importantes y necesarios para su desarrollo personal.
Se acercarán a otras personas, en algunos casos de otras culturas, y conocerán lo que es la diversidad y la convivencia.
Caminando al aire libre por parajes naturales también aprenderán que el medio ambiente y la Naturaleza son un bien que hay que proteger y cuidar.

Foto de Benjamin Elliott
Consejos básicos para preparar el Camino con niños
Un plan de vacaciones que incluya niños pequeños tiene que estar bien organizado para que sea adecuado para ellos. Estos seis consejos son el punto de partida perfecto por el que empezar:
1- Edad mínima recomendada
Aunque no existe una edad límite para hacer el Camino, se recomienda que los niños tengan al menos 3 años. A partir de esta edad es cuando empiezan a ser un poco más conscientes de todo y pueden disfrutar de lo que les rodea.
2- Uso de un carrito infantil para la montaña
Los carritos de montaña son una manera segura y muy cómoda de llevar a niños menores de seis años cuando están cansados. Una alternativa muy práctica a la que muchos padres recurren para facilitar la movilidad y reducir el peso que les tocaría portar a cuestas.
Estos carros todoterreno están diseñados para ser usados en suelos irregulares, como los que se encuentran en algunas partes del recorrido. Tienen una mayor resistencia, suspensión avanzada, buena tracción y ruedas más grandes. Además de contar con espacio extra de almacenamiento para poder transportar agua, algunos alimentos y otros elementos esenciales.
3- Preparación física previa
Al igual que los adultos, los niños también deben prepararse físicamente para aguantar en buenas condiciones varios días de camino.
Una estupenda manera de entrenar con ellos es realizar excursiones o caminatas cortas. Comenzar unas semanas antes les servirá para ir familiarizándose con la actividad y ser conscientes del esfuerzo que les espera. Reforzarán a la vez su confianza e irán creando expectativas positivas sobre la gran aventura que van a vivir.
4- Adaptación al calzado adecuado
Con la elección del calzado no se puede improvisar, de hecho es algo fundamental. Debe ser adecuado para caminar largas distancias y ofrecer un buen soporte para el pie, comodidad, amortiguación y estabilidad.
Es recomendable que los niños lo usen varias veces antes de comenzar el viaje para ponerlo a prueba, acostumbrar los pies, y evitar posibles problemas de rozaduras y ampollas después.
5- Equipaje y mochila propia
Pensar de antemano que ropa y artículos no pueden faltar en el equipaje, metiendo lo estrictamente necesario, facilitará la movilidad y ayudará a hacer el Camino mucho más agradable.
Los niños deben portar su propia mochila con un peso acorde a su edad, a su estatura o tamaño y a lo que puedan cargar.
Entre las cosas que incluir en ella no debería faltar: una botella de agua, pequeños snacks, gafas de sol y crema protectora, una gorra y un chubasquero, y una camiseta ligera de cambio. Se puede valorar también llevar algún juego o cuaderno de dibujo para entretenerse.
6- Mejor época del año para caminar con niños
Elegir bien la estación en la que realizar el Camino de Santiago es vital, porque el clima y el número de peregrinos que te puedes encontrar puede condicionar mucho la experiencia.
Aunque el Camino se puede hacer cualquier época del año, con niños es recomendable elegir meses en los que el tiempo es más benigno o templado. Y los de primavera y otoño son los más idóneos para que los pequeños disfruten sin problemas el viaje.
- Las temperaturas son agradables: no hay riesgo de sufrir el calor sofocante de verano o el frío que puede hacer en invierno.
- No hay tantas personas: lo que permite disfrutar de cada etapa, del entorno natural y de los pueblos de paso sin agobios.
- Los paisajes son muy especiales: las flores, los árboles y campos verdes inundan todo de vivos colores en primavera, mientras que el otoño tiñe la naturaleza de espectaculares tonos rojos, dorados y marrones.
Rutas recomendadas para familias con niños

Foto de Drew Gilliam
El Camino ofrece multitud de rutas para realizar el peregrinaje hasta Santiago de Compostela, pero el Camino Francés, el Camino del Norte y el Camino Portugués son los más adecuados, cómodos y accesibles para los más pequeños.
Camino Francés
El Camino Francés es uno de los más populares y por el que cada año transita el mayor número de personas. Esto hace que cuente con más servicios y posibilidades de alojamiento bien equipados para atender las necesidades de las familias con niños.
Se caracteriza por tener tramos suaves y llevaderos, perfectos para empujar un carrito. Aunque también conviene saber que hay algunas pendientes, en etapas hasta Roncesvalles y en O Cebreiro, que pueden suponer un esfuerzo extra.
Camino del Norte y Camino Portugués
Estas rutas tienen un relieve más pronunciado que el Camino Francés pero, también, unos paisajes costeros de vegetación exuberante en algunas etapas que entusiasmaran a los más pequeños.
El Camino del Norte discurre junto al mar Cantábrico. El Camino Portugués combina costa, acantilados, paisajes rurales de interior, pueblos y ciudades con mucho encanto, que enriquecerán el viaje a nivel cultural e histórico.
Ambas rutas ofrecen la posibilidad de hacerlas en etapas flexibles, que se pueden adaptar al ritmo de los niños.
Planificar las etapas diarias del Camino con niños
Una de las claves a la hora de planificar el viaje es establecer de antemano las distancias que se van a cubrir cada día, siendo realistas.
Es importante ajustar los kilómetros de cada etapa al ritmo y las capacidades de los niños para evitar sobresaltos y problemas a la hora de completarlas.
Algunas recomendaciones que pueden servir de ayuda:
1- Fijar distancias cortas: si las etapas son de 10 a 15 km como mucho, será más fácil que los más pequeños las completen sin acusar mucho el cansancio. Imponerles distancias más largas, además de fatigarles, puede hacer que su ánimo decaiga y que no deseen continuar.
2- Paradas frecuentes: los altos para descansar deben ser habituales. Estos momentos deben aprovecharse para disfrutar del entorno, hidratarse bien y comer algo.
3- Informarse de los servicios: contar con información de interés relacionada con los servicios disponibles a lo largo del camino (fuentes, áreas de descanso o asistencia al peregrino) es esencial para establecer en qué puntos parar.
4- Flexibilidad de horarios: lo ideal es comenzar a caminar temprano y parar al mediodía, pero con niños se hace necesario adaptar los horarios en función de su nivel de energía, el cansancio o el estado de ánimo.
Si tienes en mente realizar un plan de vacaciones diferente en familia que os una más, el Camino de Santiago será una gran elección.
Un reto bello y enriquecedor con el que niños y mayores crearéis juntos recuerdos imborrables en conexión con la naturaleza, la historia y la cultura de Galicia.