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"El Camino nos da inclusión mediante el ocio y el deporte"

03/12/2023

Angel López, Presidente de ENKI. Camino de Santiago Imagen: ENKI

Deportista y luchador nato, Ángel López (Luarca, 1984) es el actual Presidente de la Fundación ENKI, una organización sin ánimo de lucro que tiene como aspiración contribuir a la construcción de una sociedad mejor, promoviendo la eliminación de barreras y la inclusión de las personas con diversidad funcional a través del ocio y el deporte. Con apenas 19 años sufrió un accidente de tráfico que derivó en una grave lesión medular y desde entonces, tiene una tetraplejía que no le impide ser una persona autónoma y un gran deportista, pero por encima de todo un entusiasta de la vida. De hecho, “durante años peleé en soledad por la inclusión en el deporte y, cuando conocí el proyecto ENKI, no dudé en sumarme, porque supe que corríamos en la misma dirección”. Una carrera que no cesa y que tiene en su iniciativa “ENKI en el Camino” la mejor muestra de que a veces las barreras son más mentales que físicas y que las personas con diversidad funcional también pueden hacer el Camino. El próximo año organizan ya la cuarta edición de esta iniciativa que pretende hacer visible y sensibilizar sobre el deporte adaptado y la diversidad funcional.

Promotor en primera persona de esta iniciativa, ¿de dónde nace la idea?

Siempre digo que es como si el Camino estuviera hecho para ENKI. Une deporte, disfrute, satisfacción personal e inclusión. En el grupo que personas que participamos hay gente con discapacidad pero también muchas personas sin ella que nos acompañan y dan soporte y ayuda. El Camino nos da lo que busca ENKI: inclusión mediante el ocio y el deporte. No importa el nivel de discapacidad que se tenga, es lo bueno de las bicicletas que usamos, las handbikes (un tipo de bicicleta de tres ruedas que se propulsa, se dirige y se frena con los brazos), siempre vamos al ritmo que lleva la persona más lenta. Además, el Camino discurre más por el monte, con todas sus barreras, que por carretera y eso nos permite recordar que hay cosas que no se pueden cambiar ni quitar, pero lo que sí podemos hacer es hablar con albergues, casas rurales, hoteles para que vayan adaptando sus establecimientos.

"Es como si el Camino estuviera hecho para ENKI"

¿Es ese el mayor obstáculo con el que os topáis?

Este tipo de barreras son las que más nos encontramos. Al final una persona invidente o sorda que hace el Camino puede dormir casi en cualquier establecimiento pero los que vamos en silla de ruedas, no. Las puertas deben ser anchas para que podamos pasar, el baño ha de estar adaptado. Y esto es lo que más nos suele costar del Camino. Este año por ejemplo, partimos de Roncesvalles y nos vimos obligados a hacer una etapa de 126 km porque no teníamos un punto intermedio donde poder alojarnos de manera adaptada y tuvimos que alargar la etapa por esta razón. Hay que darse cuenta de que las handbikes llevan dos ruedas paralelas, atrás o adelante, con una determinada anchura para no volcar. De hecho, este año ha habido puntos muy estrechos en determinadas etapas donde nos ha costado mucho trabajo pasar por la anchura de nuestras bicis.

Camino de Santiago en bici manual o handbike


¿Cómo es un día cualquiera en el Camino?

Nosotros no hacemos como un peregrino al uso, que se levanta muy temprano y acaban de andar al mediodía. Los lesionados medulares debemos evitar estar mucho tiempo sentados en la misma postura. Nos levantamos, desayunamos y arrancamos entre las 8 y las 9 de la mañana. Solemos tener dos paradas intermedias rápidas de avituallamiento y una tercera que hacemos al mediodía algo más larga. Llegamos a destino cerca de la hora de la cena. Al final necesitamos casi todo el día para hacer una etapa porque nuestras sillas y bicicletas requieren de una logística. Disponemos de un furgón de soporte que está a unos 10-12 km de distancia por si necesitamos su ayuda en caso de avería o pinchazo.

¿Seguís el trazado original del Camino?

Intentamos hacerlo al máximo posible, lo bueno ahora es que el Camino de Santiago cuenta con su propio trazado para bicicleta, discurre muy cerca del camino original y cuando es necesario, incluso abren pistas para ello. Pero cuando ya no hay manera de seguirlo por la particularidad que sea, salimos a la carretera.

Camino de Santiago en bici manual o handbike

¿Se necesita una preparación o formación previa?

Nada, este año hemos tenido gente que no sabía lo que eran los piñones o los platos de una bici. Cualquier persona puede participar en nuestra iniciativa y si alguien va a un ritmo diferente, el resto nos adaptamos. O vamos al suyo o hacemos dos grupos. Eso sí, siempre es bueno que nos avise si tiene experiencia previa o no para que podamos hacer esa adaptación.

¿Con lo mejor que te quedas de esta experiencia?

La primera edición de ENKI en el Camino fue todo un shock. Lo hicimos de León a Santiago. Llegamos el 13 de marzo del 2020 a la Plaza del Obradoiro, y justo al día siguiente comenzó el Estado de Alarma. Fue todo un batacazo, teníamos planificado un acto de recibimiento con las autoridades que quedó suspendido por toda la situación. Y sí que tuvimos la espina clavada un tiempo. Pero yo me quedo con todo lo que no se ve, con la historia de superación de cada persona que hace el Camino. Participa gente que lleva poco en silla de ruedas y que en una semana aprende cosas que a mí me ha costado diez años. Es un aprendizaje de disfrute. Y eso que a veces hacemos verdaderas burradas: hacemos más 120 km con la bici de mano y luego nos servimos de nuestros brazos para todo: para pasarnos a la cama, a la ducha, etc. Pero aun así la gente repite.

"Yo me quedo con todo lo que no se ve, con la historia de superación de cada persona que hace el Camino"

Hoy, 3 de diciembre, es el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, ¿qué le dirías a cualquiera que acaba de quedarse en silla de ruedas?

Yo les diría que todo lo negro que se ve al principio no es tan negro. Salir del hospital es muy duro porque descubres todas las barreras arquitectónicas y porque es como si todos los problemas fueran más grandes porque te acabas de quedar en silla de ruedas. Yo ahora esos mismos problemas no los veo tan enormes. Al principio, si yo quería entrar en una tienda y había una barrera me iba, no lo intentaba, no quería molestar. Ahora en cambio, pido ayuda a quien sea. Llevo 20 años en silla y todo ha mejorado mucho. Pero por mucho que todo cambie, la persona que ha sufrido el accidente al principio lo va a ver todo muy oscuro. Es fundamental el apoyo de una asociación o una fundación para sobrellevar el primer batacazo. Hay que pedir ayuda y no echarse para atrás. Está demostrado que las personas con discapacidad que queremos tener una vida normal la tenemos, con sus complicaciones, pero como las puede tener todo el mundo.

ENKI en la Praza do Obradoiro, ENKI Asociación

¿Cuál es el siguiente reto?

El año que viene si toda va bien, haremos la Ruta de la Plata. Saldremos desde Sevilla y llegaremos a Santiago. Desde la web de ENKI, se puede inscribir todo el que quiera acompañarnos, personas voluntarias con y sin discapacidad. Juntos somos capaces de superar todas las barreras del Camino.

 

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